Plata de ley, poder mexicano

Mientras la escena creativa, gastronómica y cultural en México se levanta como punta de lanza a nivel internacional, cada vez más vibrante y marcando pautas en el mundo, PAAR propone mirar hacia atrás a aquellos elementos que por ser tradicionales no han recibido la gloria y el interés que merecen. . Un ejemplo puede ser la plata, por lo que Paulina Villalpando, fundadora de la marca de joyería 100% mexicana, busca recordar su relevancia histórica. Y es que México es uno de los principales productores de plata del mundo y con el mayor número de orfebres que la trabajan.

Como una tradición artesanal que se ha compartido muchas veces de generación en generación, comprar piezas elaboradas en plata en México es apoyar y promover que esta tradición siga viva.

La plata siempre ha sido importante en México desde la época prehispánica. “Los españoles no tenían conocimientos de minería ni explotación cuando llegaron al país y fueron los pueblos indígenas quienes compartieron sus saberes y prácticas ancestrales”, explica Paulina al respecto. Desde la época colonial hasta 2005, México fue el principal productor mundial de plata, cuando Perú lo superó. Hoy en día, la mayor parte de la plata se extrae de México, Perú, Chile y China.

Y es que, a pesar de que en los últimos años las piezas chunky doradas marcaron la máxima tendencia, con la vuelta a la moda de los 90 y personalidades como Beyoncé, Zendaya, Kim Kardashian y Rihanna, que han apostado por las joyas de plata de ley, las joyas de plata están marcando su manera.

Su “renacimiento” va de la mano con aquellas tendencias de finales de los 90 y principios de los 2000, cuando personalidades y cantantes, como Britney Spears, siempre lucieron joyas de plata.

DESTRUYENDO MITOS: MITOS Y VERDADES SOBRE LA PLATA

Aunque ya se ha establecido de diferentes maneras, nunca está de más recordar que la plata y el oro se pueden mezclar y combinar perfectamente entre sí. La plata es un gran metal que se puede usar con piedras preciosas como los diamantes negro, blanco, champán y sal y pimienta, así como con piedras preciosas de colores como la morganita, la aguamarina, el peridoto, la turmalina o con perlas. Grandes diseñadores han apostado por la plata como su metal favorito, como David Yurman.

Para que un metal se llame plata de ley, las aleaciones deben contener al menos un 92,5 % de plata pura, por lo que se denomina plata "de ley". A los orfebres les gusta especialmente la plata porque tiene excelentes características de trabajo: es flexible, se dobla fácilmente en nuevas formas y se mantiene en su lugar. Además, es extremadamente fuerte y puede soportar los golpes que vienen con el uso frecuente.

Por ello, la plata es uno de los tres metales nobles, junto con el oro y el platino. “La plata era más valiosa que el platino en la época victoriana y por eso era el metal elegido para hacer las tiaras de la aristocracia”, explica Paulina.

Sin riesgo de deslustrarse, la plata no se oxida con facilidad y es fácil pulirla en casa para devolverle su máximo esplendor. La plata es sin duda el metal favorito de muchos, especialmente de los hombres para sus joyas.

PAAR Y PLATA

Muchas de las piezas de PAAR en sus colecciones permanentes están elaboradas en plata -hasta un 60% aproximadamente-, fomentando la ancestral tradición artesanal que existe en nuestro país. Incluso muchos de sus bestsellers y piezas más representativas, como los Pendientes Clementine, los Gemelos a medida, los Collares Mini Cardio y Mini Espiral, el Anillo y Pulsera Jungle, y la Gargantilla Sankuru, por citar algunos.

Además, PAAR ofrece sus servicios de reparación de piezas de plata y el servicio de reciclaje de metales como la plata en la elaboración de nuevas piezas.